Ir al contenido principal

Cinco meses sin fumar

Hace ya bastante que no escribía, la verdad no he disfrutado de mucho tiempo libre últimamente, además hemos realizado alguna reforma en casa que me ha obligado a tener el ordenador guardado durante un tiempo para que no se estropeara. Sigo sin fumar, son ya cinco meses y hoy cuando me disponía a escribir he tenido que mirar el histórico del blog para confirmar la fecha. Ya  queda muy lejos el día en cual encendí ese último cigarro y aún sigo sin entender como pude esperar tanto para dejarlo si al final a sido tan fácil… hace unos meses quería hacer una pequeña prueba, fumarme un cigarrillo para ver que sentía, pero creo que ya no voy ni a realizar este intento, son tan pocas las ganas que tengo de fumar que si tengo que experimentar ya buscaré otras opciones.
Durante este tiempo me he vuelto más observador en el tema del tabaco, ahora observo mucho más a la gente que fuma, no por ganas de fumar un cigarro, es mas por buscar el motivo que nos impulsa a iniciar este hábito tan peligroso, veo a muchos fumadores que andan por la calle inhalando su dosis de nicotina a los cuales no veo ni disfrutar de ese cigarrillo, simplemente sacian su sed de nicotina. Cuando fumaba no me daba cuenta de esto, quizás el cuerpo lo pide con tanta insistencia que solo tienes tiempo de darle lo que pide, sin necesidad de analizar lo que esta pasando.
La verdad que a día de hoy estoy muy satisfecho por haber llegado a los cinco meses sin fumar, cuando empecé estaba contento por cada día que pasaba, pero era más por haber conseguido un reto diario. Ahora ya no es un reto diario, simplemente no fumo, es tan simple ahora que lo he conseguido…

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un mes y medio sin fumar

Ahora que ya no fumo soy mucho más observador con los hábitos y costumbres de los fumadores, quizás es por mera curiosidad, quizás por encontrar un motivo que me explique como pude estar tanto tiempo enganchado al tabaco, pensando que sería imposible dejarlo. Ahora me fijo mucho más en la gente que hay fuera de un local fumando, en el balcón de su casa (ahora en invierno no creo que nadie pueda decir que es un placer...), al dar el primer sorbo a un café por la mañana, el cigarrillo de quien espera... cuando paso cerca de alguno de estos fumadores me pregunto a mi mismo cual fue el motivo que me llevó a pensar que no podría dejar de fumar. Hoy hace 6 semanas que dejé de fumar y ya he llegado a un punto en el cual no necesito el tabaco para nada, ni hay situaciones que me sean más complicadas de afrontar sin un cigarrillo. Estoy contento, puedo pasar los días sin notar la adicción que me consumía cada día poco a poco. Cuando me planteé dejar de fumar creía que un mes y medio sin fuma...

Segundo día sin tabaco, un gran paso

El segundo día, es un día especial, ya he conseguido pasar todo el primer día sin fumar y esto es un gran avance, para una persona no fumadora puede resultar hasta cómico oír esto, para un fumador estar un día entero sin fumar es un reto. La verdad si he podido estar un día entero, no veo la razón para no estar otro… Lo que me resulta más curioso ahora que no fumo, es la atención que presto a las personas fumadoras, las observo para ver su reacción al encender un cigarrillo, cuando sacan el humo, al comprar un paquete en la máquina de tabaco… es el ritual de esta gran adicción. También estoy contento de haber elegido este fin de semana para dejar de fumar, el lunes es fiesta, creo que así cuando el martes vuelva al trabajo, estaré más acostumbrado a la nueva vida sin humo, ya llevaré tres días sin fumar. Al escribir esto también me doy cuenta de la obsesión por el tiempo pasado de los que dejamos el tabaco, me explicaré mejor. Al dejar de fumar siempre estamos contando los días que hac...

El último cigarrillo (el desenlace)

Ayer os dije que iba a contar como fue mi último cigarro. La verdad, cada vez que pensaba que iba a dejar de fumar no me imaginaba como sería fumarse un último cigarrillo, supongo que la idea que tenía es que se me haría demasiado corto, no sabría si dar más caladas para ingerir más humo o por el contrarío intentar que no se quemara demasiado rápido para que el momento se hiciera más largo, casi eterno. También pensaba donde me lo fumaría, supongo que si lee esto un no fumador tiene derecho a reírse y pensar que menuda estupidez, pero para un fumador es una situación que tiene mucha importancia. Bueno, en cuanto al lugar donde fumar ese último cigarro, era difícil de decidir, no podía ser un cigarro andando por la calle pendiente de otras cosas, ni en una parada de autobús mientras veo como llega el mío y aún no he fumado ni la mitad, no podía ser así, tenía que ser un momento en el que dedicase toda la atención del mundo a ese cigarro y además tenía que disponer del tiempo suficiente...